Internet de las Cosas Industrial amplía gama de negocio para el canal
Como una de las tecnologías más disruptivas para la última década, el Internet de las Cosas (IoT) se convirtió en el anfitrión del ecosistema que ha gestado la Revolución Industrial 4.0 para monitorizar actividades; la expansión de este fenómeno a la industria abrió caminos que el canal de distribución puede capitalizar; el reto es saber cómo.
A la conexión de objetos físicos a la red o entre ellos mismos es lo que se conoce como Internet of Things (IoT) o internet de las cosas. Y a la misma interconexión entre dispositivos, pero concentrados en la operación inteligente de máquinas, computadoras, robots o mecanismos industriales es lo que se conoce como Internet de las Cosas Industrial (IIoT).
La comunicación de los dispositivos con el internet se realiza a través de sensores o circuitos que recogen información del exterior y, a la vez, habilitan una cantidad incalculable de datos en centros de almacenamiento con los que realizan diversas acciones. En términos de negocio, tanto la comunicación como el almacenamiento, pueden ser la génesis para un plan de fabricación y distribución.
“Conocemos la tecnología, pero cuando la trasladamos al sistema empresarial no vislumbramos el entorno completo, las grandes amenazas y los potenciales de negocio”, aseguró César Betancourt, gerente de soluciones en CompuSoluciones, quien advirtió que algunas empresas sólo se fijan en las soluciones del IoT, pero dejan de lado otros componentes como los mismos dispositivos o los sensores, ya que estos se han multiplicado y cada día los equipos empiezan a integrar nuevos.
En opinión de Jorge de la Fuente, ingeniero de ventas de Belden, en la industria, estas nuevas tendencias de mercado se reflejan en los edificios. “Los edificios deben estar preparados para recibir nuevos equipos IP. Por eso hay que pensar en el número de dispositivos que va a haber, tanto móviles como fijos. Todo esto es una explosión de mercado para integradores y distribuidores”, aseguró.
Actualmente, tan sólo en América Latina se tiene estimado que los dispositivos con cierta inteligencia alcanzan los 50 millones; en México, de acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (ODCE), alcanzan los ocho millones de unidades. Es decir, artefactos con alguna capacidad de monitoreo, control, optimización o automatización.
Alejandro Rojas, arquitecto de soluciones en Datacenter, Storage & Server de CVA , consideró que las oportunidades de negocio, tanto para fabricantes como distribuidores, están en el aprovechamiento de la capacidad de los dispositivos inteligentes en la industria con el business to business. “Nos permiten tener información precisa y en tiempo real sobre los clientes y podemos realizar actividades necesarias para la innovación”, puntualizó.
En cuanto a la industria, Betancourt aseguró que se pueden tomar mejores decisiones con los datos que los dispositivos han resguardado. “Hemos visto casos de empresas que conectan sus paneles solares a internet para que sepan cuándo debería ser una mejor forma para distribuir la energía de acuerdo a tipos o a cómo se comporta la planta. Con el IoT tenemos la oportunidad de mejorar a nuestras industrias”, expresó.
La rentabilidad de los dispositivos inteligentes dispersos en los diversos sectores del mercado (edificios, salud y ciencia, consumidor, transporte, industria, medio ambiente, seguridad, etcétera) se basa, primero, en capacitar al canal para que sepa cómo adaptar su producto o servicio a las necesidades del usuario final; segundo, en aprovechar las innovaciones en redes de comunicación y saber asegurarlas y, tercero, ofrecer sistemas de almacenamiento capaces de analizar y procesar el volumen de datos recopilados.
Capacitación, un salvavidas en el mercado
El internet de las cosas en la industria, según Claudio García Gay, director de cuentas de A10 Networks en México, requiere del trabajo conjunto de diversas áreas. “Si alguien decide poner IoT en sus medidores eléctricos, tiene que ver si su estructura lo soporta, sino debe darle mantenimiento”. Y este trabajo conjunto, necesita de la capacitación que ofrecen varias de las empresas involucradas en temas de IoT.
Mauricio Guerra, gerente de la división industrial en Luguer y especialista en este sector, detalló que el conocimiento que debe sobresalir es el de las redes, ya que es el común denominador entre ellas. La empresa capacita a su personal de soporte técnico, de ventas, también a integradores y usuarios finales.
“Tradicionalmente, las empresas buscan a los integradores de servicios para que los asesoren en cómo hacer esta transformación al IoT. Necesitan nuevas capacidades y habilidades para poder hacer este tipo de consultoría. Así vamos a saber detectar un proyecto de IoT, atesorarlo y saber cuáles son las herramientas y marcas que estarían apoyando a la transformación según cada segmento del negocio”, aportó César Betancourt, quien aseguró que el tema de la consultoría es un desafío para el canal de distribución porque es él quien debe saber qué requiere el usuario final.
Del mismo modo, De la Fuente, coincidió en que es importante tener habilidades básicas de cabildeo, pero igual de importante es tener en cuenta su evolución constante. “Estábamos muy acostumbrados a hacer cableado de cobre o fibra o un cable UTP de cuatro partes o a que la evolución del internet se basaba en la velocidad. Pero vienen nuevas tecnologías como internet de un par”, y ejemplificó con los termostatos de aire acondicionado en los hogares o en lugares de servicio público que podrían funcionar con una velocidad de 10 megas porque no necesitan un gran volumen de datos ni velocidad en la comunicación”, dijo.
Aunado a ello, Alejandro Rojas, declaró que el canal también debe tener habilidades en el tema de usabilidad en la interfaz para asegurar una experiencia positiva a los usuarios en el uso de la tecnología.
Seguridad, ¿negocio o desafío?
La seguridad seguirá siendo polémica en lo que respecta a la era digital. La vulnerabilidad de la información personal es uno de los principales retos que deben enfrentar, tanto fabricantes como distribuidores; por ejemplo, Rojas recomienda que entre las habilidades básicas del canal, también debe estar el tema de la seguridad.
Forcepont reveló los datos de la encuesta Predicciones sobre Seguridad Cibernética 2019 que le hizo a sus clientes y el 81% de ellos identificaron a las interrupciones en las redes del IoT como un punto vulnerable en su seguridad.
“Ya no es sólo el impacto económico hacia las personas sino el social. Ya se pueden meter a hackear elevadores, el sistema acondicionado, de incendio, de acceso y si eso lo llevas a una fábrica, peor todavía porque puede poner en riesgo la vida de muchas personas”, advirtió Jorge de la Fuente, y por ello recomendó que el acceso a un inmueble o dispositivos debe estar controlado.
Es necesaria una visión holística de las posibles amenazas y vulnerabilidades de los datos. En este sentido, Betancourt apuntó que se necesita comenzar a planear una política para saber qué es lo que tiene acceso o no a un dispositivo IoT. En todo caso, actualmente existen protocolos, pero aún no están homogeneizados, ya que los fabricantes son los únicos que tienen la autoría de ellos y son diferentes entre sí.
Por la vulnerabilidad de las redes en las industrias, Guerra opinó que el proveedor puede asegurar la confianza del cliente final si crea una seguridad en sus redes internas. “Ahí es un punto importante: los fabricantes se están protegiendo contra este tipo de problemas. Además, también hay proveedores de soluciones de seguridad tipo firewalls por el impacto y crecimiento de esta tecnología (IoT)”.
Tendencias de negocio en puerta: el Big Data y la red 5G
En la industria, los dispositivos inteligentes tienen un impacto directo en la economía global. Tan solo para los países integrantes del G20, esta tecnología representa el 68% del PIB, según Oxford Economics; incluye la manufactura, la agricultura, minería, gas, petróleo y servicios públicos. Dichos sectores generan un volumen incalculable de datos, se estima que 180 000 millones de terabytes, y otro reto importante gira en torno a la tecnología que necesitan para ser almacenados.
“Toda la información que se crea a través de los nodos inteligentes necesitan ser almacenada, procesada y soluciona mediante Big Data, Analíticos o Inteligencia Artificial (IA) que es donde hay más oportunidades de negocio para un canal de distribución. Pueden proveer soluciones de software, de servidores, de almacenamiento o un conjunto de Data Center para procesar y gestionar toda la información que genera el IoT”, puntualizó Alejandro Rojas.
Durante 2017, de los países latinoamericanos, México ocupó el segundo lugar en compras de soluciones de Big Data al adquirir 26.7% de un mercado que generó ventas por 2.9 mil millones de dólares, según un análisis de la firma Frost & Sullivan.
La gama de productos para comercializar se robustece para el canal de distribución porque tiene la posibilidad de ofrecer soluciones a los problemas de almacenamiento de datos y de redes. “El internet de las cosas va a significar una carga extra de tráfico considerable”, aseveró Claudio García Gay y confesó que la red 5G impulsará la viabilidad del IoT.
El 2019 figura como el año del advenimiento de la red 5G, última aportación de la tecnología en telecomunicaciones, y su demanda es una oportunidad de negocio para los proveedores de servicios cuya responsabilidad es capacitarse para aprovecharlo.
Al respecto, Jorge de la Fuente aplaudió la apertura de la red 5G en México porque, a pesar de ser lenta, significa una revolución en la forma de comunicarnos por la alta velocidad en la transmisión de datos. “Suena muy fácil hacer la implementación, y de repente como usuarios pensamos que es una actualización de software. Pero, en realidad, tenemos que actualizar el hardware de la estructura de los Service Provider, y eso implica un costo”, agregó.
Como parte del crecimiento mundial del IoT, en Colombia se desarrolló la Alianza 80/180, el nuevo proyecto del TicTac, cuyo propósito es crear una red de empresas que generen un espacio de análisis y discusión sobre temas relacionados con el Internet de las Cosas. El programa cuenta con la participación de empresas que ofrecen soluciones basadas en el IoT para crear un ambiente de oferta y demanda.
En CompuSoluciones identificaron que el desconocimiento sobre la ruta que deben seguir los fabricantes o el canal de distribución es un problema importante. “No saben por dónde empezar. Por eso, mi mejor consejo para ellos es que entiendan qué tipo de clientes tienen, sobre qué vertical están e infórmense sobre la misma para entender la oferta de su fabricante hacia esa vertical en el tema de IoT”.
El mundo digital nos consume, pero Mauricio Guerra, confía en que la expansión del sistema IoT en la industria es una oportunidad para expandirse, capacitarse y seguir investigando.
Soluciones de seguridad y 5G para industrias de A10
-Ofrece adaptación del internet de las cosas a 5G desde Service Provider para asegurarlas.
-Apoyo al canal de distribución con cursos de capacitación; al partnet, le ofrecen completar su portafolio de productos.
-Brindan niveles de performance altos a partir de la combinación de un sistema operativo y hardware en ACOS y una arquitectura de súper cómputo.
-Garantizan precios muy accesibles al canal en tecnología.
Claudio García Gay, director de cuentas de A10 Networks en México, aseguró que no existe otro fabricante para cubrir la necesidad de seguridad que A10. “Realmente el Internet de las Cosas se conecta a internet, pero hay alguien que debe monitorear, debe haber una aplicación o consola: todas estas son áreas de oportunidad, pero ya no son exclusivas de la red sino también de la aplicación como tal. Se abren nuevas oportunidades de desarrollo. Y nosotros tenemos un sistema operativo y hardware innovador que nos permite estar a la vanguardia en temas de cloud, en internet de las cosas, red 5G y machine learning”.
