La calidad de UPS en México
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El tema de la calidad de energía está ligado a la protección de inversión que hacen los usuarios de equipos electrónicos y de cómputo a nivel global.
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 En México, la Norma Oficial Mexicana NOM-001-SCFI-1993 se aplica a los dispositivos que tienen la finalidad de resguardar los equipos ante las variaciones de voltaje. En nuestro país no existe una norma que regule las instalaciones eléctricas, por lo que se presentan el robo de energía y la mala conexión, factores que ?sumados a las condiciones naturales? ocasionan variaciones de voltaje, ruidos, picos y sobrecargas que dañan los equipos que emplean energía eléctrica.
De acuerdo con los principales fabricantes de equipo para protección eléctrica en el país, los problemas más comunes del suministro de energía son picos, alto y bajo voltaje, ruido eléctrico y apagones. Cada problema tiene un origen específico e impacta de forma distinta en los equipos de una empresa, oficina u hogar, por lo cual es conveniente conocer un poco más de su naturaleza. Una forma de prevenir y corregir las fallas de la energía eléctrica son los sistemas de supresión de picos, reguladores de voltaje o equipos de alimentación ininterrumpible (UPS, por sus siglas en inglés), también conocidos como no breaks.
La calidad a prueba Los equipos deben integrar normas de calidad que garanticen su funcionamiento; por ejemplo, la NOM (Norma Oficial Mexicana) en el caso de México y UL (Underwriter Laboratories) en Estados Unidos. Esta última no sólo avala la calidad de fabricación del dispositivo, sino también califica las condiciones de seguridad para operación; por ejemplo, que el dispositivo no se incendie, que entregue voltajes inadecuados o haga cortocircuito. Faustino Gómez, gerente técnico del Laboratorio de la Canieti, señala que la norma que se aplica en México es la NOM-001-SCFI-1993, que se refiere a la seguridad en equipos electrónicos, pero muchas veces las dependencias del gobierno o consumidores piden a los proveedores que cumplan con la norma mexicana MX-162-2002, que se refiere a los sistemas electrónicos de energía ininterrumpible. “La NOM 001 es exclusivamente de seguridad del producto hacia el usuario, esto es que no cause problemas a quien lo opera e incluso a animales.” Por lo que respecta a la MX162 es una norma exclusivamente para UPS, está enfocada al desempeño del producto como tiempo de autonomía, tipo de rectificación, tiempo de uso de batería, que ya es más a lo que sería la calidad del producto”, explicó el entrevistado.
Esquemas de normalización La Canieti cuenta con un laboratorio de pruebas para este tipo de equipos, el cual está regido por una norma mexicana reconocida a nivel internacional. El laboratorio se caracteriza por ser de tercera parte, independiente, regido bajo la norma, y canaliza servicios a quien los solicite, obviamente da prioridad a los socios del gremio. Cualquier usuario puede recibir los servicios, sólo tiene que llenar un formato de solicitud de prueba; éste debe estar acompañado con la carta de solicitud de pruebas con formato libre, dirigida al jefe del laboratorio y en la que se indique el nombre del producto en español y la prueba que se le aplicará, lugar de procedencia, si es nuevo o reconstruido. En un formato se arrojan todos los resultados que se obtienen de las pruebas efectuadas al producto y el organismo certificador es quien evalúa, con base en la norma, si cumple o no. Cabe precisar que el laboratorio de la Canieti no es un organismo certificador, esa función corresponde a NYCE, que tiene la facultad de aprobar si es que cada equipo cumple con los criterios, de acuerdo con las pruebas señaladas en las normas. “Por ejemplo, a un UPS se le realizan de 30 a 45 pruebas para verificar el desempeño y calidad”, agregó el experto. La cámara trabaja muy de cerca con el organismo certificador NYCE. “Ofrecemos la asesoría para obtener la certificación de producto en cuestión de seguridad para telecomunicaciones, aplicaciones comerciales y residenciales”. En este apartado, el encargado del laboratorio de la Canieti señaló que cuenta con la experiencia necesaria: “Trabajamos desde hace 42 años, desde antes que se crearan las instituciones de certificación”.
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Consideraciones ambientales Gómez precisó que en México se tiene una situación diferente a otros países; por su posición geográfica es considerado 100% tropical. En este caso, las normas son más rigurosas por condiciones ambientales como la humedad relativa. Para ello se ven factores de resistencia de materiales y componentes a la corrosión. En México la norma señala que la Comisión Federal de Electricidad debe entregar la energía de 127+- vatios 10% y 220+- vatios 10%. “En términos de uso doméstico (127+-), con un rango 114 a hasta 139, es lo más común. En ocasiones tenemos líneas con menos de 114 volts y en otras hay variaciones de hasta 145 volts, esto para el procesamiento de datos se vuelve crítico, por lo que se deben tener fuentes inteligentes de protección de energía”, precisó el entrevistado. Agregó que algunos de los equipos de cómputo actuales operan de 90 hasta 140 volts, sin ningún problema, pues el regulador o UPS cubren para una descarga de más de 140 volts, a veces hay sobrecargas de hasta 160 y con el equipo se protege la inversión.
¿Qué recomienda a quienes venden UPS? Últimamente hemos probado muchos equipos, con base en eso se debe considerar que los ofertantes tengan el porcentaje de regulación y el tipo de onda correctos en sus productos, además del tiempo de autonomía y que cumplan con lo que manifiestan. “Para que los usuarios sepan que les van a responder, pues hemos visto que muchas veces lo que dice el manual está muy lejos de lo que en realidad hace el producto”.
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