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El mercado no vive de líderes


La experiencia de Tecnosinergia como integrador y distribuidor de soluciones de videovigilancia le ha permitido adecuarse a las necesidades de los usuarios en México.

Con cuatro años en el mercado, Tecnosinergia inició como una empresa casera, realizando pequeñas instalaciones y proyectos dispersos, con la salvedad de aprender de cada una de ellas.

Al crecer comenzó con una distribución masiva, pero de dos años a la fecha incrementó su nivel en inventario hasta lograr mayoreo en algunos productos y submayoreo en otros.

La empresa distribuye marcas que no son muy conocidas, pero que tienen muy buena calidad y dejan amplio margen al integrador. “Aunque no es el mismo para el distribuidor que para nosotros, la idea es que el integrador tenga mayores ganancias, pues si se comparan las características de una marca conocida con las que manejamos, son muy similares y la posibilidad de subir los precios es amplia”, detalló Daniel Nissan, director comercial de Tecnosinergia.

En la actualidad, la firma sólo se dedica a la distribución e implementación de grandes proyectos; las instalaciones pequeñas y caseras quedaron de lado, pues no le representan ganancia atractiva.

A decir del directivo, tratan de hacer integraciones de mayor nivel y relaciones con desarrolladores, constructoras o corporativos que tengan proyectos que sean rentables para la empresa donde se aplique mayor conocimiento y sea más allá de sólo conectar.

De análogo a digital
“Cuando iniciamos ya existía la parte IP, el análogo ya estaba en las últimas. Hay una diferencia importante: en digital la cámara sigue siendo análoga y la función de digitalizarla y trasmitirla vía IP es del grabador, y en IP, la cámara como tal se convierte en un recurso de red y en lugar de transportar video transporta datos”, explicó Nissan, al reconocer que lo mejor es la combinación de ambos mundos, pues hay aplicaciones para CCTV analógico o digital y aplicaciones para video IP o para ambas. “Sin duda alguna, no es momento de desparecer el CCTV digital”.

Agregó que la tendencia para el año entrante es que la mayoría de los grabadores serán híbridos y usen cámaras analógicas e IP. De igual manera, el uso de la tecnología va de acuerdo con la naturaleza del proyecto y del tipo de cliente; por ejemplo, si es un usuario que tendrá una persona dedicada a darle mantenimiento al sistema, si tiene conocimientos o estará en constante monitoreo de las cámaras con ciertas aplicaciones.

“Actualmente se vende 75% de digital y 20% IP y entre 10% y 15% híbrido. La tendencia es que se mueva a híbrido. Dudo que IP puro tenga mucha aceptación, pues en muchos casos IP no está preparado o requiere demasiados recursos”, señaló.

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