El genio de Apple y el canal
A raíz de la muerte del cofundador de Apple, Steve Jobs, han salido muchos reconocimientos al aporte que hizo a la industria de TIC, incluso un sinfín de manifestaciones de fanatismo, pues hay quienes lo idolatran por la innovación en sus productos.
Sin duda, su legado está más allá de la industria del cómputo, pues su visión e innovación puede ser aplicada en muchos aspectos, pero las cosas como son; pues a pesar de que Jobs tiene registradas varias patentes, principalmente de diseño, lo que hizo, en los casos del iPod, iPhone e iPad, fue reunir en un dispositivo tecnologías que ya existían y estaban patentadas por otras empresas.
De tal manera que aplicó, con visión, la integración de componentes, por medio de una interfaz sencilla de usar y dio accesibilidad al contenido; esto se dice fácil pero no pocos tienen esa capacidad de hacerlo, pues el exdirector y presidente de la firma de la manzana, detectó una necesidad en el mercado y la supo cubrir con productos que dieron estatus y facilidad de uso a los usuarios, debido a lo anterior fue que se popularizaron sus dispositivos entre las masas y la fama de Jobs se desbordó, pues incluso muchos le atribuyeron la creación de la PC.
Entre otros aspectos, el directivo creó una necesidad entre la gente y, por supuesto, el producto para cubrirla, sin duda eso deja muchas enseñanzas para cualquier ámbito; en la cadena de suministro de TIC, también irrumpió con el modelo de negocios.
Por una parte muchos fabricantes de accesorios compatibles con los productos de la manzana hicieron negocio, con lo cual Jobs creó un ecosistema de proveedores, algunos de ellos mexicanos, alrededor de sus equipos, sobre todo compatibles con el diseño, pues en funcionalidades ya existían otros que las satisfacían perfectamente.
También cambió el esquema de canal, pues al inicio sus productos, principalmente en México, eran para canal cerrado, por medio de las tiendas del fabricante o através de pocas franquicias.
Con la diversidad de aplicaciones que podían ofrecer sus productos para integrar soluciones hubo la necesidad de tener un canal capacitado para ofrecerlas, por ello comenzó con el trabajo de un selecto de canales, por medio del entonces Tallard, (ahora AvNet), TechData e Ingram Micro, éste último con la venta a canal abierto de los reproductores de mp3, smartphones y tablets del fabricante.
Sin duda, el binomio Apple-Jobs siempre será un claro ejemplo de lo que se requiere de un ecosistema de integración y un canal de cómputo.
