Ciudades Digitales, el futuro en el presente
Por dónde comenzar
Al hablar sobre este tema, es común encontrar que el concepto se remite a la facilidad o dificultad con el que la población accede a servicios de Internet en una zona específica.
Pero la Ciudad Digital es más que eso, son múltiples factores que se combinan para formar una comunidad que verdaderamente aprovecha las herramientas de las TICs, donde se habla de seguridad, acceso a información, simplicidad en trámites, pagos o demandar servicios al Estado, entre otros.
Según la Gaceta Oficial del Distrito Federal, la Ciudad Digital es un entorno de ámbito local en la que existe un avance considerable en la implantación de la Sociedad de la Información y el Conocimiento en todos los ámbitos de actividad ciudadana, tanto en los sectores público y privado, como en el nivel individual y colectivo.
Esto genera nuevas formas de interrelacionarse, el fortalecimiento de la comunicación entre todos los actores, especialmente entre el gobierno y el ciudadano.
En una Ciudad Digital la administración pública es líder integrador de las iniciativas y responsable de abatir la brecha digital. Esto último ha generado muchas discusiones en diversos foros, tanto de la iniciativa privada como del gobierno, pues las diferencias que hay entre las personas, según su posibilidad para hacer uso de una computadora con conexión a Internet y su capacidad para utilizar los recursos existentes en la Web para su beneficio, pueden detener o explotar proyectos de la envergadura de este tema.
Para los municipios, la tecnología facilita la integración de sus dependencias y moderniza la administración pública, así los gobiernos pueden acercarse aún más a las necesidades y reclamos de sus ciudadanos para poder ofrecer una respuesta rápida y acorde a cada situación, como lo asegura el estudio de Motorola Solutions.
Todos ganan
Al final, el beneficio directo se refleja en el incremento en la calidad de vida de los habitantes de cada ciudad que se suma a esta iniciativa, además de un equilibrio entre medio ambiente, economía y sociedad.
“La innovación asociada a una ciudad inteligente permite crear nuevos modelos de desarrollo sustentable”, señaló Humberto Pérez, especialista en Soluciones de Smarter Cities y Sector Público en IBM México.
Por ejemplo, al comunicarse en red las organizaciones gubernamentales y sus dependencias se mejora la gestión, consiguiendo así un vínculo más estrecho entre autoridades y gobernados, con mayor transparencia administrativa y eliminando procesos burocráticos obsoletos.
Se pueden atacar puntos como la seguridad, con la digitalización se reducen los niveles de inseguridad, se optimizan los sistemas de comunicación y video vigilancia de las fuerzas del orden.
También el tema de la salud se ve beneficiada a través de la conexión entre hospitales, ambulancias, médicos y pacientes, junto con la digitalización de los estudios médicos.
Por otro lado, el sistema de tránsito inteligente, a su vez, agiliza la circulación de los automóviles y previene tediosos embotellamientos; sin olvidar a la academia, la investigación y la cultura, pues el acceso a la banda ancha les permite una interacción total con los interesados, así como la pronta respuesta y por consiguiente reacción tanto de autoridades como de ciudadanía ante situaciones de inseguridad o catástrofe.
A la par, la iniciativa privada, en este caso los fabricantes involucrados en TIC, tienen una oportunidad de integrar todos los sistemas que se requieren, los cuales son llevados por canales de integración, mismos que se especializan y llegan al cliente final ya sea el gobierno o en su defecto proveedores de servicios de red.
Los socios utilizan, a su vez, al mayorista para conformar un portafolio robusto que les permita concursar por esos proyectos: es un círculo virtuoso de negocio.
