“Ahora no sólo se valoran las capacidades físicas de los dispositivos, pues el usuario pondera el nivel de personalización a través de estos aplicativos, como mapas o redes sociales. Estos valores agregados comienzan a diferenciarse y dependiendo del tipo de uso que se le quiera dar es como el consumidor elegirá”, sentenció Valdés.
Entre las verticales, en todas las industrias se muestra la posibilidad de ofrecer más servicios que fomenten comercio electrónico, con transacciones seguras mediante conexión de datos o comprar artículos o servicios como de punto de venta (PoS); es decir, la evolución de la información para acelerar procesos.
Depende del mercado y tamaño de la empresa, donde estos desarrolladores tienen oportunidades; para mercado corporativo tienen desventajas pues no siempre cuentan con la infraestructura para soportar soluciones complejas.
Pero la oportunidad crece considerablemente cuando se habla de comercio móvil, donde pueden mercadear sus aplicaciones a cada proveedor que puede montarlas en los teléfonos que ofrece.
Otro nicho es el desarrollo de aplicaciones propietarias, pues con el modelo de negocio para venderlas a través de las tiendas es posible llegar a mercados globales.
“Ya no se requieren de suites estándar a las que la empresa tiene que adecuar sus necesidades, la personalización también beneficia a las PyMEs, sobre todo en el segmento medio, donde los usuarios muestran interés sobre la movilidad sin la necesidad de tener que depender de oficinas y aumentar su productividad”, acotó el consultor de IDC.
Predecir el rumbo del mercado
La creatividad e innovación son los factores determinantes para tener éxito en el nicho de aplicaciones móviles de consumo, así como conocer y aprovechar todos los componente físicos de cada dispositivo, ya sea conectividad, cámara de video, teclados o sistemas de geo referenciación (GPS).
“La movilidad tiene que avocarse a resolver problemas de negocio para acercar la información necesaria en cualquier momento; en consecuencia, tener mejores herramientas para toma de decisiones y empoderar al usuario móvil; es decir, que los avances tecnológicos estén al servicio de la productividad y continuidad de negocio”, mencionó Becerra.
En aplicaciones para usuario final, con funciones sencillas sin requerir altos niveles de soporte, los pequeños desarrolladores tienen mayor oportunidades de éxito, así como orientarse a teléfonos de bajo costo, que tengan mayor base instalada, también representan ganancias, así como aplicaciones de cómputo en la nube.
Un diferenciador es participar en todas las plataformas; si bien no es sencillo, es necesario para no perder competitividad, así como tomar constantes capacitaciones.
Otra de las razones por las que las empresas adoptan sistemas de movilidad es la reducción de tiempos de respuesta y mayor flexibilidad, pues las organizaciones están adoptando esto para estar comunicadas desde cualquier parte.Otro factor fue la existencia de versiones móviles de sistemas operativos empresariales, como CRM, ERP.
Es importante tomar en cuenta que las principales compañías que demandan movilidad empresarial son aquellas que basan su modelo de negocio en esquemas de distribución en general, ya sean servicios o productos.
El GPS también es un diferenciador para potenciar las aplicaciones, esto busca mejorar los servicios que ofrecen las empresas. “Hay que tomar en cuenta que el mercado móvil tiende a verticalizarse en mercados como seguridad pública o comercio al detalle e incluso manufactura. Es necesario desarrollar aplicaciones que se integren a la oferta de los fabricantes y proveedores de servicios, que tengan sentido de negocio a dichas verticales”, concluyó Valdés.
