Hosting en México: un cambio fundamental

Por Juan José Delgado

Con la llegada de Internet y la difusión de la banda ancha nació propiamente el concepto hosting, como lo conocemos hoy en día: un servicio brindado por empresas que poseen y operan bunkers con todas las facilidades requeridas: pisos falsos, aire acondicionado, amplias líneas de telecomunicaciones, sistemas de seguridad, entre otros.
Entre los beneficios del hosting destacan la eficiencia de sus operaciones, la minimización de riesgos y el ahorro de inversiones de capital para la empresa a la hora de conformar una infraestructura adecuada.
Según la consultora Select, los principales usos para los servicios de hosting han sido, en su mayoría, de alojamiento de páginas Web (80% de la oferta), seguido por servicios de correo electrónico (74% de la oferta).

El presente del hosting
Hoy en día, la tendencia de la oferta se ha concentrado en tres tipos básicos de hosting:
Compartido: El hoster aloja varias aplicaciones de distintos clientes en un mismo equipo propiedad del hoster.
Co-ubicado: El hoster aloja y mantiene un servidor propiedad del cliente en las instalaciones del hoster.
Dedicado: El servidor completo se destina a las aplicaciones del cliente.
La diferencia de costos entre los diversos servicios y los costos asociados al hoster son factores que han contribuido para que un gran número de empresas, profesionistas independientes e individuos con gusto por publicar en Internet acudan a las ofertas extranjeras, con sus pros y contras.
De hecho, según Netcraft, el total de servidores Web alojados en México se ha mantenido en alrededor de 11,000 unidades en los últimos dos años.

¿Cuál es nuestro reto?
El reto para la industria es brindar niveles de servicios locales a precios razonables para apoyar al crecimiento del mercado local. Afortunadamente, las compañías de tecnología se han esforzado en proponer nuevas herramientas como virtualización, mismas que permiten ofrecer servidores dedicados virtuales. Esto es, un servidor con todas las características y beneficios de uno dedicado, pero a un precio mucho más accesible.
Gracias a la virtualización, las empresas pueden alojar varios servidores de diferentes características en un mismo equipo físico; de esta manera, se logran economías de escalas que anteriormente eran imposibles.
Para impulsar no sólo el crecimiento del hosting local, sino del desarrollo en Web mismo, a finales de 2009 anunciamos un ecosistema completo para crear y alojar sitios Web, servicios y aplicaciones a través de tres vertientes principales:
Apoyo a desarrolladores Web: Facilita el uso de la última generación de herramientas de desarrollo sin costo.
Apoyo a hosters locales: Brinda condiciones comerciales preferentes para la adopción de la virtualización y la colocación de ofertas locales competitivas de Web hosting, así como la presentación de dicha oferta a los desarrolladores.
Generación de demanda: Crea un espacio “vitrina” donde luzcan los desarrollos y  puedan obtenerse referencias para nuevos proyectos.
A la fecha, el ecosistema ha conseguido la suscripción de más de 3,000 desarrolladores y de tres empresas de hosting nacionales que ya están ofreciendo servidores dedicados virtuales: Xertix, Servnet y Localweb.
Con esto, podemos vislumbrar que se empiezan a gestar nuevas ofertas y propuestas de valor en México. Además, algunos de los hosters están creando alianzas de distribución de tal manera que un canal puede comercializar servidores virtuales de Web, bases de datos para ERP o lo que se le ocurra. Asimismo, vemos cada vez más ofertas de aplicaciones especializadas, hechas en México, que utilizan no sólo el modelo “Software as a Service”, sino también apalancan el modelo de distribución arriba descrito.