Un ojo vigía en todas partes

La vigilancia por medio de videocámaras, digitales o análogas, ha generado debates en los aspectos sociales, culturales y legales; sin embargo, en el tema tecnológico ha venido a revolucionar las formas de hacer negocio.

A partir del concepto de circuito cerrado de televisión y con el fortalecimiento de la tecnología IP se pueden ver aplicaciones específicas como resolución de problemas médicos, monitoreo de cobros en punto de venta, observación de ganado y eficientización de procesos en la manufactura; lo anterior es sólo un pequeño cúmulo de argumentos que indican que videovigilancia va más allá de la seguridad.

Sin embargo, el sector de la protección y prevención es donde la vigilancia por video ha tenido mayor auge, por las situaciones de delincuencia que ponen en riesgo a las personas y sus bienes.

En este sentido, han surgido muchas empresas que ofrecen tecnología para la protección de activos, con un sinfín de marcas de productos y aplicaciones que, aunados al servicio de monitoreo y personal capacitado, entregan soluciones completas de resguardo.

Lo anterior es sólo un ejemplo del avance del desarrollo en este sentido, pero existen aplicaciones, como las arriba mencionadas, en las que los distribuidores especializados en CCTV han crecido, en muchos casos ayudados por los avances tecnológicos.

Cuando el protocolo IP fue seguro, se dijo que la cadena de TIC tendría muchas oportunidades de negocio, incluso mejor que los proveedores de seguridad, pero no fue así, la realidad es que muchos fabricantes han observado que ambos canales presentan crecimientos muy similares.

Sin duda, la especialización para la industria es pieza medular para lograr el éxito que se vislumbra y no conformarse con la simple instalación de videocámaras; en este sentido, existen proveedores de software y accesorios para crear aplicaciones de nicho.

Esta es una nueva categoría denominada análisis de video, en la que por medio de software se pueden predecir comportamientos y evitar pérdidas, accidentes o paros en una cadena de producción, por ejemplo, o, en el caso de la protección, se pueden tomar acciones precautorias que inhiban el comportamiento delictivo.

En cualquiera que sean los casos, la tecnología en videovigilancia llegó para quedarse y, una vez más, ésta no cumpliría sus objetivos por sí misma, para ello requiere de la integración de gente preparada.