Tecnología ycompetitividad
La educación y la tecnología son los factores que permiten a los países tener mejor grado de competitividad; para ambos factores se requiere de inversión, lo cual ha sido reconocido por diversos organismos internacionales, públicos y privados.
El problema está detectado, la solución aún no existe. Hace años, los discursos por parte del gobierno se enfocaban en la educación básica y en la mano de obra calificada.
El sexenio pasado se habló de la tecnificación de las empresas, principalmente en las medianas; ahora, el reto es que las más pequeñas tengan la facilidad de acceder a las herramientas tecnológicas y al personal altamente capacitado.
Si bien, los factores que determinan el grado de competitividad son la tecnología y la educación, poco se ha hablado de ellos en nuestro país.
Claro, son pocas las aportaciones que se han visto, sobre todo en la creación de software; por ejemplo, en factura electrónica, certificados digitales y algunos ERP que se han exportado, dichas aportaciones indican que se está sembrando una semilla que se debe regar para que germine de manera correcta y a su vez genere más frutos.
La tecnología como herramienta de negocio ya es apreciada por los empresarios; sin embargo, hace falta capital humano en áreas de la creación de software que distingan a México.
La gestación de programas podría ser una opción de industria que atraiga atractivos dividendos al país.
En esta tarea se deben redoblar los esfuerzos que en conjunto deben realizar las entidades gubernamentales, las instituciones académicas, proveedores de tecnología y desarrolladores, lo cual redituará en una mejor competitividad del país.
Quienes han entendido este modelo están dando de qué hablar en el mundo. Como muestra, tenemos a India, un país que ha realizado esfuerzos en conjunto y está exportando software y recursos humanos de calidad. Y México, ¿cuándo?