Editorial

Las cosas como son

Esta semana Telmex dio a conocer su red internacional MPLS, la cual le permitirá, entre otras ventajas, una mejorar la administración de su red de fibra óptica y los servicios IP entre sus centros de datos desplegados a nivel continental.

La mencionada red otorgará a Triara en Querétaro y Monterrey las facilidades para ofrecer servicios de primerísima calidad y llevarlos a sus clientes mediante su red y los centros de datos en Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Estados Unidos y Perú, gracias a lo cual podrá decir adiós a los cuellos de botella y asegurará su tráfico en beneficio directo de las más de 30,000 PyMEs que contratan sus servicios.

 

Al mencionar a Telmex recordamos aquellos días en que se abrió el mercado mexicano de la larga distancia a la libre competencia: en sus anuncios televisivos la empresa del ingeniero advertía a sus clientes sobre los supuestos engaños con espejitos, haciendo referencia a que el gigante telefónico ofrecía más valor que sus competidores.

 

Esta vez toca a eSemanal decirlo emulando a la telefónica: no se dejen engañar, las empresas serias necesitan estrategias de comunicación integrales, completas, profundas, profesionales; también necesitan competir con calidad, con métricas bien definidas que proporcionen verdadero valor.

 

Valor que algunos no supieron ni saben apreciar, miopes mentales que inundan la industria. Valor y trabajo que se ve disminuido cuando gente como José Luis Domínguez –quien prefiere vender sus “procesadores como bolillos”, en triciclos callejeros y no en la panificadora, como debe ser– y su equipo, deciden sus estrategias de comunicación basadas en elementos fuera de lugar. Elementos que no son suficientes para posicionar o mantener una marca, ya no en la preferencia, sino siquiera en la mente de quienes la deben distribuir.

 

A quien también le falla este trabajo de comunicar e informar es a la Business Software Alliance y su agencia de relaciones públicas, La bola de papel. De la primera es más fácil conseguir información desde afuera del país y la segunda bloquea el camino que debería habilitar para el mejor flujo de información; en otras palabras, ambas organizaciones no hacen su trabajo.

 

Y es que cualquiera puede tener sus cinco minutos de fama, lo cual no es garantía de tener el talento para mantenerse en la cima. Cinco minutos contra los más de siete millones de minutos de eSemanal sustentados en la forma de decir las cosas alrededor de esta industria de tecnología: con pleno conocimiento de causa.

 

La comunicación de eSemanal obligadamente pasa por procesos de calidad en los que lo importante, ante todo, es saber lo que se dice, entender primero la tecnología, los negocios de la empresa interesada y después mostrarlos al público de interés, ustedes amables distribuidores, que no se merecen chismes, mucho menos desinformaciones o aspectos parciales del negocio.

 

Durante todos estos años, y los que faltan, el interés de este medio seguirá siendo informarles objetivamente acerca de la comunicación íntegra de las empresas de la industria, sin interés particular por compadrazgos o relaciones oscuras o poco claras que puedan inclinar la balanza injustamente en favor de nadie, haciendo uso de nuestro derecho a la LIBERTAD DE EXPRESIÓN.

 

Nuestro compromiso es continuar nuestro trabajo periodístico con imparcialidad y sin líneas. Decimos las cosas sin hipocresía, sin tapujos ni dobles juegos. Decimos las cosas como son y lo seguiremos haciendo en beneficio del canal y de la industria a quienes servimos, haciendo uso responsable del poder que nos confiere su preferencia y la calidad moral que nos ha caracterizado durante casi 15 años. 

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