Alrededor del 90% de las MiPyMEs no trabajan con la nueva facturación 4.0: CANISOFT

El tiempo se agota para que las micro, pequeñas y medianas empresas implementen la facturación 4.0, con la intención de no perder negocios, así como estar libre de consecuencias por auditorias, por lo que, los canales están frente a una oportunidad enorme de ayudar a las MiPyMEs en su proceso y rentabilizar la creciente demanda.

Con el cierre del año 2022 y en la puerta de entrada el 2023, llegan nueva oportunidades y obligaciones que las empresas deberán tomar en consideración si no quieren ver reducidas sus posibilidades de negocios, pues a partir del 1 de enero de 2023 la facturación 4.0 será una obligación. Lo anterior, abre oportunidades importantes para los canales de distribución al estar en posibilidad de comercializar soluciones de software que faciliten al universo de 4.5 millones de MiPyMEs apegarse al nuevo comprobante fiscal.

“Vemos una oportunidad muy grande no solo desde el punto de vista de actualizar el software (capacitación y consultoría) a las empresas que ya lo utilizan, sino para las nuevas empresas que están instalando un software, por lo que el canal debe estar preparado para poder ayudar a las empresas a echar andar su facturación 4.0”: Arístides Palma, Presidente de la CANISOFT.

Así bien, la CANISOFT (Agrupación de Empresarios de la Industria del Software) tiene entre sus filas a diversas empresas que cubren verticales de mercado especificas y las cuales pueden ayudar a las MiPyMEs en su proceso de adopción de la facturación 4.0, algunas de ellas incluyen: Acceso y vigilancia, administración escolar, comercio electrónico, control de asistencias, ERP hotelero, software para restaurantes, sistemas de punto de venta, sistemas contables, facturación electrónica CRM y más.

El tiempo se agota

Quizá, uno de los sectores más preocupantes o con los cuales se debe trabajar a fondo son las micro empresas, esos pequeños negocios que si bien no cuentan con altos presupuestos, se verán obligados a actualizarse y con ello, habrá oportunidades para los canales, puesto que, en caso de resistirse las empresas sólo querrán comprar con aquellos comercios que les entreguen una factura válida, así lo explicó Presidente de la CANISOFT: “La consecuencia inmediata es que como física o moral si entregas una factura y no está timbrada con 4.0, entonces no es deducible, por lo tanto, facturas que estés recibiendo así no las podrás ingresar como un gasto deducible en la contabilidad, por lo que, las empresas sólo le comprarán a aquellos comercios que entreguen una factura válida, convirtiéndose esto en una cadena”.

No obstante, además de perder clientes por no estar actualizado, las MiPyMEs también se pueden ver afectadas y con graves consecuencias en caso de ser sometidas a auditorias al descubrirse que no están facturando todas sus ventas.

Oportunidades para el canal

Debido al corto tiempo que ya se tiene para hacer la transición al nuevo modelo, la demanda creerá considerablemente y los canales deben estar preparados para ayudar a las compañías en sus procesos, así como agilizar los tiempos con la facturación 4.0, disminuyendo de 20 minutos a aproximadamente dos, lo que desde luego les podría dejar ganancias importantes a estos.

“Mi recomendación hacia el canal es que se enfoquen en las micro y pequeñas empresas, pues literalmente no va a poder todo el canal con el trabajo que esto implica debido a la cantidad de comercios que faltan. La oportunidad de negocio es muy grande y porque se tienen que actualizar todos, entonces enfocarse en darle la solución a sus clientes para poder cumplir con la ley les abrirá oportunidades de negocio”: Arístides Palma.

En el cierre de la entrevista que el Presidente de la CANISOFT convino con eSemanal, compartió que hace un par de meses atrás realizaron un sondeo para conocer el universo de MiPyMEs que ya estaban trabajando con la facturación 4.0, dejando ver que cerca del 90% de los negocios aún seguían trabajando con la facturación 3.3. De esto se sigue que, si en México existen cerca de 4.5 millones de micro, pequeñas y medianas empresas, alrededor de medio millón ya trabaja con la facturación 4.0, lo que deja un universo aproximado de 4 millones de MiPyMEs y oportunidades capitalizables para los canales que ofrezcan soluciones que habiliten los negocios.