
Los ataques contra los routers de Deutsche Telekom, que afectaron a aproximadamente a 900.000 hogares alemanes, han puesto en evidencia las vulnerabilidades de la infraestructura de Internet. Pero, expuso el desarrollador.
Sobre el tema, Tim Berghoff, experto en ciberseguridad de la empresa, aseguró que los ataques que aprovechan las vulnerabilidades de los routers son un negocio redondo para la industria cibercriminal. Explicó que si los ataques logran explotar los agujeros de seguridad pueden ser capaces de llevar a cabo todo tipo de manipulaciones como, por ejemplo, modificar la configuración DNS. Esto permite dirigir el tráfico de internet para poner en marcha ataques de denegación de servicio (DDoS) o, incluso, interceptar los datos personales de los internautas que se conectan a esos routers, entre ellos, números de tarjetas bancarias, si realiza compras online; o nombres de usuario y contraseñas de cualquier servicio web (correo electrónico, redes sociales, juegos).
Asimismo mencionó que incluso se puede configurar el router para que se realicen llamadas telefónicas a números de tarificación adicional sin el consentimiento del usuario. “El ataque contra Deutsche Telekom es solo la punta de un iceberg mucho más grande y lamentablemente tenemos que estar preparados para enfrentarnos a ataques similares en el futuro”, concluyó Berghoff.
Por lo anterior, la compañía ofrece tres recomendaciones para proteger los routers de ciberataques
–Actualizaciones: Para proteger el router de accesos no deseados es esencial que se encuentre actualizado. En muchas ocasiones estas actualizaciones se realizan de forma automática cuando el router se conecta con el proveedor de internet, pero no siempre sucede así. Es entonces cuando el usuario tiene que forzar esta actualización desde la propia web del fabricante.
–Contraseñas: Recomendable cambiar la contraseña que por defecto llevan los routers, el no hacerlo permite a los cibercriminales hacerse con el control del dispositivo de forma sencilla.
–Sólo dispositivos conocidos: Por último, es conveniente configurar el router de forma que solo admita conexiones de dispositivos conocidos (las computadoras y dispositivos móviles que forman parte de la red doméstica). Así se impide también que terceros hagan uso de la conexión inalámbrica.