Apple corrige sus errores
Hace ya muchos años, al momento del nacimiento de la industria de tecnología de información, tal y como la conocemos, había dos propuestas principales de microprocesadores. Por un lado, estaban los elegidos por Apple y, por otro, los preferidos por los fabricantes de PC.
En un momento determinado surgieron discusiones tecnológicas acerca de cuál de ellas era mejor y cada cual por su lado, los fabricantes de procesadores impulsaron desarrollos de tecnologÃa en caminos diametralmente opuestos. Los resultados los vimos durante estos años y el canal, igualmente tomó partido por la propuesta que le redituara más.
AsÃ, los que según los fabricantes de sistemas personales resultaron mejores procesadores fueron utilizados en dos mundos que debÃan atender a una misma necesidad entre los usuarios.
Sin importar cuánto se discuta al respecto, el gran perdedor fue quien curiosamente era considerado mejor opción y es que, mientras Apple se cerró ante las crecientes demandas del mercado por contar con abasto suficiente de sistemas personales Macintosh, IBM e Intel, de la mano de Microsoft, decidieron el futuro de la industria y se llevaron la casi totalidad de los clientes en el mundo.
Estas computadoras Macintosh, a todas luces innovadoras, resultaron ser las que menos apoyo recibieron de la industria, las que menos desarrolladores de software y fabricantes de hardware tenÃan en su ecosistema, asà como las que menos clientes obtuvieron a lo largo de los años.
Muy a pesar del mito ese donde se afirmaba que la PC no era una máquina para diseño asistido por computadora, menos para ser usada en el diseño artÃstico o profesional, las PC se hicieron cada vez más poderosas y echaron por tierra el gran mito de la supremacÃa de las Macs sobre las PC.
La razón es simple, intrÃnsecamente eran y son más caras y el asunto era, y lo sigue siendo hoy mismo, vender más cada dÃa. Aspecto que la compañÃa de las manzanas desdeñó al grado de que hoy prácticamente, al menos en México, tiene muchos menos distribuidores, prácticamente se comercializa únicamente mediante el retail de todos tan temido y, de nuevo, está en plena crisis al contar con apenas 2% de market share en esta industria de tantos sistemas personales fabricados y vendidos al año.
Esa cifra, por supuesto, es una clara muestra de la crisis por la que pasa hoy la empresa de las manzanas y por la cual tomó realmente la decisión de irse con Intel para seguir produciendo sus sistemas de cómputo personal.
Esto significa el fin a la diversidad de caminos, da por terminada una necedad muchos años sostenida contra viento y marea, y decide unir esos dos mundos en uno solo.
Aun a pesar de que el propio Steve Jobs, mandamás en Apple, asegure que no venderá su sistema operativo para usuarios de PC basadas en Intel, el mercado le impedirá se salga con la suya y pronto los usuarios podrán comprar un Mac OS para su PC y no para su Mac.
En el mismo sentido, los usuarios de Mac podrÃan optar por instalar Windows en sus sistemas; la realidad de las cosas es que quizá el gran perdedor sea el dominante Windows, ante la notable superioridad visual de los tigres de la manzana. Lo interesante ahora es saber qué estrategia adoptará la empresa de Bill Gates para evitar más efectos negativos en su negocio. ¿Por fin aceptarán reducir los precios?