Ensamble de portátiles

Firmas analistas confirman adopción ascendente de computadoras portátiles en México, pese a que la propuesta de ensamble nacional de estos equipos aún no tiene gran participación, señalan que seguirá los pasos de la desktop de caja blanca.

A inicios de este año, la firma de investigación Gartner previó que el crecimiento en ventas globales de las computadoras portátiles superaría al registrado en equipos de escritorio: las primeras presentarán un incremento de 17.4% durante 2005 y las de escritorio sólo alcanzarán 6.1%.
En su pronóstico para este año, en lo que respecta a tecnologías prioritarias para México y América Latina, ubica en tercer sitio la movilidad de la fuerza de trabajo.
En el caso específico de México, IDC anunció un crecimiento en el mercado de portátiles al cierre de 2004 de 24.6%, lo que se tradujo en embarques por 307,000 unidades. Tan sólo en los últimos tres meses de ese año fueron vendidas 103,000 laptops, cantidad que rebasa la marca de ventas alcanzada –de 100,000 equipos– en un trimestre.
Dichas cifras, aunadas a la evolución de los servicios inalámbricos en el país, ofrecen un panorama alentador en este segmento, aunque no para los ensambladores, pues la realidad es que casi el total de los equipos vendidos en el país son de compañías internacionales.
“Hoy las marcas multinacionales están por encima de las mexicanas”, expresó Edson Sánchez, analista senior de Sistemas Personales de Select. Y es que, de acuerdo con esta firma de análisis, la oferta de portátiles nacionales apenas representa 6% en el total del mercado.
Por su parte, IDC señala que la propuesta móvil de ensambladores mexicanos representó sólo 1.7% del total de las ventas en 2004.
Composición de la oferta móvil nacional, según Select
75% integradores
25% equipos con marca nacional
Bajas ventas en componentes de portátiles
Las ventas que registran los fabricantes de componentes para equipos portátiles aún son bajas. En este sentido, Oscar Martínez, gerente de Kingston en México, indicó que no existe el mismo crecimiento que con caja blanca de escritorio.
Por su parte, Rodrigo Sandoval, director de Canales para América Latina de Intel, informó que tienen un crecimiento importante en ventas de procesadores móviles, “en los dos últimos trimestres se ha estado duplicando, aunque todavía viene de bases pequeñas, mas la perspectiva de crecimiento y la oportunidad de mercado son grandes”, apuntó.
El gerente de Mercadotecnia de Canal de la marca verde de procesadores, Jorge Cortés, refirió que el mercado de notebooks reporta el crecimiento más alto en América Latina, aunque aseguró que “en el segmento de caja blanca aún no hay despegue.”
¿Por qué poca participación?
De acuerdo con el analista de Select, en 1995 se registra la presencia de un jugador con la propuesta de estos equipos ensamblados, al paso del tiempo se suman otras marcas, pero es hasta cuatro años después cuando comienza a identificarse una participación de este mercado, en porcentaje mínimo.
A seis años de distancia, la casi nula presencia del ensamble de portátiles obedece a una serie de desventajas que enfrentan integradores de todos tamaños. Una de ellas es la poca diferencia que existe en precio entre los productos mexicanos y extranjeros, contrario a las máquinas de escritorio, explicó Sánchez.
Pese a que cuando el usuario compra una lap top caja blanca imagina precios bajos, “en el país existe poca oferta del preensamble de equipo portátil o barebone, por lo que son más caros”, señaló Martínez.
De acuerdo con la investigación anual de demanda que realizó Select en 2003, el precio es el primer diferenciador que el consumidor toma en cuenta al momento de decidir su compra, seguido de la garantía.
A pesar de que existen ofertas de portátiles nacionales e internacionales con un precio promedio de $10,000 pesos, “los precios no han bajado lo suficiente para masificar”, aseguró Laura Cano, gerente regional de Sistemas Personales de IDC Latinoamérica.
Agregó que de octubre a diciembre del año pasado, casi la tercera parte de las 103,000 unidades embarcadas se ubicó en precios de $1,700 a $1,900 dólares.
Clasificación de equipos portátiles y precio, según IDC
Low-end – $1,500 dólares
Medium – Entre $1,500 y $2,000 dólares
High end – Más de $2,000 dólares
En ese sentido, Sandoval, destacó que por definición, los precios promedio de estos equipos son significativamente más altos que los de escritorio.
Asimismo, Carlos Rodríguez, representante de Ventas de Western Digital en México y Centroamérica, indicó que “el mercado exige equipo barato de portátiles, lo cual podría propiciar que los fabricantes reduzcan precios”.
Martínez manifestó que en el propósito de disminuir el costo de estos equipos algunos integradores llegan a sacrificar la calidad.
Cabe mencionar que en el segmento bajo de precios se ubican componentes como los procesadores Celeron, de Intel, y Athlon.
Manuel Flores, gerente general de Texa, recordó que en 2003 los precios eran similares entre ofertas móviles nacionales y foráneas, “pues tan sólo existía una diferencia de 10%, por ello el usuario tomaba la opción de una multinacional y no de una máquina mexicana”; el directivo asegura que en la actualidad esto ha cambiado, pues “la diferencia de precio es de 20% en equipos económicos y hasta 25% en sofisticados”.
Con una visión global, George Shiffler, analista de Gartner, apuntó que “las PC móviles se vuelven atractivas para un creciente rango de usuarios, una de las razones es la rápida caída de precios.”
Otra desventaja que presenta el mercado de ensamble nacional y que los analistas de Select e IDC resaltan, es que cuando el usuario final adquiere un equipo móvil, piensa más su inversión, por lo que busca respaldo de una firma reconocida, al considerar que sólo ésta le otorga mayor seguridad en soporte, reparación y garantía. Sin embargo, ya existen algunas marcas nacionales que otorgan dichos servicios.
Los riesgos que implica la movilidad, tales como golpes, caídas, derrame de líquidos, entre otros, son factores decisivos en la necesidad de los servicios de garantía y soporte.
“En este tipo de equipos el servicio posventa es muy importante –aun más que en los de escritorio– para ofrecer al cliente esa percepción y seguridad de que está respaldado en la compra de su equipo”, precisó Sandoval, de Intel.
El estatus que ofrece contar con una notebook, desde que recién iniciaba la oferta en el país y en la actualidad, también ubica al ensamble nacional en cierta desventaja, puesto que inclina al usuario a comprar un equipo de renombre mundial. “La gente compra conceptos, más allá de la propia máquina”, señaló Cano.
¿De mala calidad?
Frente a la ola de competidores transnacionales, el canal de ensambladores local también enfrenta el reto de ser percibido como fabricante de calidad y así alcanzar participación en el mercado.
De acuerdo con David González, director de Mercadotecnia para América Latina de Intel, la percepción de menor calidad en los equipos nacionales, es un problema cultural, ya que “el talento y creatividad mexicanos no tienen nada que envidiarle a otros países.”
A decir de Cano, los fabricantes de procesadores trabajan con su canal para generar conciencia de la importancia de la excelencia en la integración de estos equipos.
Al respecto, Cortés señaló que trabajan en certificaciones compuestas de sesiones teóricas y prácticas a profundidad, que abordan todo lo relacionado al ensamble. “Hay que ampliar el concepto de certificación”, expresó.
En el caso de Intel, Sandoval explicó que por medio del programa Intel Inside, apoyan a los integradores más desarrollados (CAT, Lanix, Lufac, Sumitel y Texa) para que realicen publicidad y generen demanda, además de credibilidad.
Resaltó que es una labor que no verá resultados de la noche a la mañana, pues existe una barrera para aceptar que se trata de la misma eficiencia en características o superior a la de equipos internacionales.
Además, el fabricante ofrece herramientas y procedimientos a los ensambladores, para medir la calidad y mejorar procesos de manufactura.
“Con esto contribuimos con el canal, pues de otra forma no tendrían acceso o sería difícil obtener el servicio de una consultoría, para asegurar su calidad en línea de ensamble”, refirió Sandoval.
En este tenor Héctor Yubeili, director de Compras de Centel, refirió que aunque existe la impresión de mala calidad en las computadoras móviles locales, “la gente compra y esto rompe cada vez más un paradigma.”
El mercado ilícito es una de las amenazas que sufre la industria y también alcanza y perjudica la credibilidad de los ensambladores mexicanos respecto a la calidad, pues “con el objetivo de obtener un mayor margen, algunos adquieren componentes de la oferta ilegal”, explicó el directivo de Kingston.
Añadió que su labor para contrarrestar la competencia desleal, es informar al canal acerca de las garantías y capacitación que pueden obtener al trabajar con los fabricantes.
En ese sentido, Flores, de Texa, aseguró que quien está interesado en formar una marca cuidará la calidad, pues improvisar implica riesgo. “No pueden perder por unos cuantos pesos que ahorran en la compra de malos componentes”. Igualmente subrayó que nadie queda exento de fallas, dado que “la tecnología no tiene palabra de honor”, expresó.
Alejandro Romero, director de Productos y Mercadotecnia de Synnex, enfatizó que utilizar componentes de calidad, originales y comprados dentro del marco de la legalidad, aunado a un buen servicio, ayudará a mejorar la percepción de calidad en estos equipos, aunque manifestó que “la creencia de mala calidad en el ensamble va disminuyendo”.
Rodríguez de Western Digital, opinó que la calidad está en los componentes y en quién ensambla la máquina, señaló que de igual forma que existen actores que ensamblan con eficacia a costo accesible.
Sigue el camino de la PC local
Los entrevistados coincidieron en que el segmento de caja blanca hoy día es respetable en los equipos de escritorio, por lo que puede ocurrir lo mismo en el caso de las portátiles.
“En la actualidad ensamblan con más calidad las desktop, eso tiene que pasar con los barebones”, mencionó Martínez de Kingston.
“Creo que se presentará un fenómeno similar al de hace más de 10 años, cuando surgieron cajas blancas por todos lados. Si bien no será en esas cantidades, tanto empresas como estudiantes empezarán a adoptar notebooks ensambladas, si saben que es producto de calidad”, precisó Romero, de Synnex.
Cortés refirió que la PC de escritorio ensamblada se posicionó a partir de que existió demanda, “no hubo necesidad de realizar campaña alguna para lograrlo”.
“El usuario final no tiene problema de calidad. En Select no hablaríamos de mala calidad, pues la oferta de escritorio lo demuestra”, apuntó Sánchez.
Por su parte, Cano de IDC compartió un estudio acerca de los principales razonamientos de compra de los consumidores, al momento de decidir entre una oferta nacional e internacional de computadoras de escritorio. La analista resaltó que aunque el incremento de la propuesta local de PC móviles es bajo, su nivel de crecimiento se dará al ritmo del mercado.
Como se puede observar en el gráfico, lo atractivo del precio fue el motivo de compra que registró más alto porcentaje en la propuesta de marca local, seguido del buen servicio, soporte y garantía. En tercera posición se ubica la calidad del producto, aunque ésta se vio superada por la oferta de marca extranjera.
Cano: “Los precios no han bajado lo suficiente para masificar”.
Sánchez: “El usuario final no tiene problema de calidad. En Select no hablaríamos de mala calidad, pues la oferta de escritorio lo demuestra”.