El valor de lo “Hecho en México”

Los empresarios mexicanos tienen otro dolor de cabeza en puerta. La llegada del mercado asiático que comercializa productos de calidad cuestionable, pero a precios muy económicos. ¿Está usted preparado para hacerle frente a esta nueva guerra?.

En cualquier diccionario usted puede encontrar la siguiente definición de la palabra “valor”: cualidad de una persona o cosa por la que merece ser apreciada, o bien, precio de una cosa.
En esta definición de diccionario se encuentra implícita la esencia de la mercadotecnia: apreciar la cualidad en un producto y pagar lo justo por ella, pero ¿cuánto es lo justo?.
Lo justo es precisamente aquello directamente proporcional al valor que se le da a la cualidad del producto o servicio; por ejemplo, la marca, un atributo físico, el costo-beneficio, necesidad de adquirir cierto artículo, comodidad, cercanía, los servicios post-venta, calidez en el trato, etcétera.
Como ya he comentado en ocasiones anteriores, actualmente compramos marcas, no productos y, curiosamente, las marcas son las que encarecen a los productos, debido al valor que los consumidores les damos en nuestra mente.
Desafortunadamente, este es el tipo de valores que se han fomentado en nuestro tiempo y por ende, han desplazado a los morales.
Las consecuencias de la ola asiática
En la industria mexicana existían hasta hace algunos años, mercados muy importantes para la generación de empleos y la recaudación fiscal. Actualmente, industrias como la textil, electrónicos, automotriz, maquiladora y otras, sufren cada día un duro embate por parte de las empresas extranjeras, específicamente las orientales que han inundado el país con sus productos más no con sus empresas.
Cabe señalar que de ninguna manera me pronuncio en contra de la apertura comercial de las fronteras, ya que la considero vital para el crecimiento de un país del tercer mundo.
En lo que estoy en total desacuerdo, es que se permita que empresas extranjeras no inviertan su dinero en el país y, que sólo se dediquen a vendernos productos que compiten deslealmente con los producidos localmente, por ejemplo:
El valor del mercado de los electrónicos en México es superior a los $5,000 millones de dólares y los chinos obtienen una jugosa ganancia de él.
Lo peor no es eso, sino que se pronostica que ese segmento puede crecer hasta 500%. ¿Cuántas empresas mexicanas o extranjeras con capital en el país se beneficiarán de ello?.
En mi opinión, muy pocas. Ya que argumentan que los productos chinos están dirigidos a un segmento bajo de la población y que las marcas por todos conocidas se dirigen al segmento medio y alto.
Por lo visto se les olvida que 70% de los habitantes del país pueden ser considerados de nivel bajo, y que son los que compran a los chinos.
Recordemos el pasado: caso Televisa – TV Azteca
Hay que hacer memoria. No les vaya a suceder a todos esos “empresarios” lo que le pasó a Televisa cuando menospreció la estrategia de TV Azteca: Un producto popular combinado con precios bajos para los anunciantes. El resultado puede ser el mismo: poco a poco los chinos y los “aztecos” han ido ganando mercado y, al paso de los años, estarán más afianzados en él.
En el futuro próximo, ni las alianzas estratégicas, ni las reformas a las leyes, y mucho menos el “bloqueo” de las fronteras serán suficientes para quitarle a los chinos la fuerza de sus productos en el mercado mexicano, cuyo principal valor obedece al más simple de todos:
El económico que se ha encargado de brindarle la eterna crisis en la que se encuentra nuestro país.
Nuevamente, la decisión esta en usted.
Saludos y ¡hasta la próxima!