Almacenamiento, listo ante la necesidad
La evolución de los sistemas de almacenamiento ha estado a la altura del avance de las TIC, de igual manera el negocio que de ellos deriva. A nivel mundial son pocos los fabricantes que desarrollan y manufacturan la tecnología de las unidades de memoria flash, que no llegan al mercado como tales, sino que manufacturan para terceros, por pedidos específicos o por grandes volúmenes.
En la actualidad esta tecnología está integrada en los reproductores de mp3, computadoras, teléfonos celulares y, de forma más reciente, en tabletas.
Debido a su versatilidad, muchos de los fabricantes de los dispositivos antes mencionados dejan abierta la opción de crecer la capacidad de almacenamiento, lo que de pie a un ecosistema de diversos proveedores que están en el nicho de memoria flash.
En unidades USB y tarjetas de memoria, la oferta es amplia, en el primer caso, se observan infinidad de diseños, colores y amplia variedad de capacidades, pues además de almacenar datos, se usa con fines publicitarios o como artículos promocionales.
En USB, se observan avances en capacidades, por el momento hasta 128 GB, no obstante, a esa capacidad limitada, se le agrega el valor agregado de seguridad, encriptación y automatización de respaldos.
En este sentido, a pesar de existir una vasta oferta, los proveedores que cuentan con estas soluciones no son más de cinco en el país.
En el segmento de las tarjetas de memoria, el mercado que las demanda se delimita a usuarios de cámaras digitales y teléfonos celulares, quienes adquieren los suministros para sus dispositivos con un canal diferente o alterno al de TIC, no obstante, el canal sigue teniendo oportunidades para la venta del almacenamiento.
En este segmento, poco a poco se comienza a ver que la oferta de unidades de estado sólido está por entrar al mercado, aunque pasa un buen tiempo para que su adopción masiva, o ésta nunca llegue, se observa gran aceptación en proyectos especiales o con usuarios que demandan desempeño, seguridad y fiabilidad.
De tal menara que el negocio de la memoria es rentable en muchos nichos, más aún si se saben las bondades, aplicaciones, capacidades y compatibilidades para satisfacer las necesidades de los clientes.
