Columnas

Evolución y reacción

La entonces PC Semanal (ahora eSemanal) dio fe (y lo sigue haciendo) de los más importantes cambios en la tecnología.


Hablar de una publicación con 14 años en el mercado de tecnologías de información implica, indudablemente, hablar de evolución y reacciones. Sobre todo en un mercado como éste, que se mueve tan rápido.


 


A lo largo de estos años, los que nos hemos dedicado a escribir de tecnología y a trabajar en este sector vemos con agrado cómo este mercado sigue creciendo en el hogar y las empresas, debido a su potencial productivo.


 


Sin embargo, durante muchos años esto no fue así, en parte o en mucho porque el uso de una computadora no era algo amigable. Durante el tiempo que estuve colaborando para la publicación, desde ser corrector de estilo hasta jefe de información, me tocó trabajar en máquinas con monitores monocromáticos (de fósforo verde chillante) y donde las órdenes para el uso de aplicaciones se tenían que realizar mediante comandos escritos: “open file”, “delete file” “copy to…”, entre muchos otros, que se tenían que memorizar y que funcionaban sobre el conocido sistema operativo MS-DOS. ¡Uf!, sólo de acordarme pienso en el tiempo que invertía frente a una máquina tecleando comandos.


 


Los programas más excitantes de la época eran los procesadores de palabras WordPerfect o WordStar 2000, las hojas de cálculo Lotus y Excel, los programas de dibujo, Corel Draw y Paint, por citar algunos. Seguro algunos de ustedes ni siquiera oyeron hablar de ellos. Una revolución de aquella época fue cuando apareció Windows, con una interfaz visual nada amigable, créanmelo, pero que cuando menos ya se basaba en iconos y ventanas, y los monitores eran a color.


 


Las PC corrían sobre procesadores Intel 286 y 386, las unidades de almacenamiento portátil eran los floppies, los discos duros se medían en “KB” no en “megas” o “gigabytes”, como ahora, y la competencia Mac era más fuerte de lo que ahora es en el terreno de las PC, con una interfaz evidentemente más agradable, pero tendiente a ser dominada por Windows por su uso masivo.


 


¡Ya llovió! ¿Verdad? Parece que fue hace muchos años y, sin embargo, le hablo de cerca de 10. La entonces PC Semanal (ahora eSemanal) dio fe (y lo sigue haciendo) de estos cambios, incluso ella misma sufrió una evolución, pues de comunicarse en un comienzo con el usuario final, hoy se dirige al mercado del canal de distribución de TIC.


 


El mercado del mayoreo de equipo de cómputo, en esos tiempos, era un terreno muy fuerte, dominado por compañías como Ingram Dicom, MPS y Merysel-Dinamia. Eran las amas y señoras en la distribución de equipos; hoy este segmento se ha pulverizado, con mayor oferta de competidores, especializándose por mercados.


 


En sus páginas se ha dado fe a la consolidación de esta industria, y hoy empresas que son de más conocidas, antes eran incipientes actores que se abrían paso en este mercado: IBM; Texas Instruments, Toshiba, Apple, Oracle, Lotus, Microsoft, Sun Microsystems, HP, Compaq, Digital, Corel y Epson, entre otras.


 


El mercado comenzó a hacerse más complejo, vino la consolidación de los ambientes tecnológicos de las empresas basados en redes y, con ello, surgió la necesidad cada vez mayor de comunicarse de forma remota y al instante.


 


Así, un proyecto universitario fue tomando fuerza en el mundo corporativo e Internet comenzó a usarse como medio de comunicación. La velocidad de la red de Internet en esa época que les hablo era de 28Kbps (y ya era una comunicación decente); hoy ya manejamos megabits de información por segundo.


 


Los nichos de mercado de las PC y los servidores también sufrieron una lucha encarnecida por muchos años, con fusiones entre compañías, quiebra de otras, en fin, conocemos hoy el escenario actual, y tratar de resumirlo en pocos párrafos es labor titánica.


 


Quiero sólo cerrar diciendo que esta pequeña pincelada de acontecimientos tecnológicos ha quedado constatada en las páginas de eSemanal, hoy bajo la dirección de Know-How Editores, y cumple un aniversario más, motivo por el cual quiero felicitar a todos sus integrantes. Me congratulo de haber sido parte de este equipo y haber aportado un pequeño granito de arena a esta causa editorial. ¡Felicidades!


 


*El autor fue colaborador de la primera época de eSemanal. Posteriormente fue parte importante del equipo de Microsoft en México y hoy se desenvuelve en las relaciones públicas.

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