Centro de datos, transformador y generador de dinero

Mucho se ha hablado de estos ecosistemas tecnológicos, sobre los productos que integran, los beneficios que ofrecen tanto a canales como a usuario final y los mercados que cada día aprovechan su funcionamiento, pero ante ello, siguen evolucionando, creciendo y resaltando como negocio.

El término de centro de datos (CD) ha pasado de ser un lenguaje difícil de comprender a ser de dominio público, a ser un tema que se aborda y se escucha con mayor frecuencia que hace unos años, por eso, abordarlo representa actualidad y tendencias.

Según Enrique López, gerente comercial de Furukawa México, este mercado continúa creciente, pues los clientes requieren robustecer su infraestructura (hardware y software) para enfrentar las demandas de sus ámbitos locales y globales.

“Esto significa poder soportar las nuevas aplicaciones y requerimientos especiales de los diferentes clientes. Es decir, un mayor enfoque en el uso más eficiente de la energía, almacenamiento de conexión directa y énfasis en las capacidades de modularidad y escalabilidad horizontal”, señaló López

Se puede considerar que en términos de ahorro de energía eléctrica la adopción de las nuevas tecnologías ha tenido una mayor aceptación, por la necesidad de obtener la certificación “LEED” (Green Council Building) y porque el consumo representa un alto porcentaje en la inversión. Sin embargo, también se puede decir que aunque el mercado tiene conocimiento de nuevas tecnologías y tendencias, aún no son del todo adoptadas debido a los costos que éstas representan.

Por su parte, Arturo Maqueo, gerente de desarrollo de negocios IT de Schneider Electric América Latina, compartió que en los últimos años la industria cambió de manera radical en la forma de visualizar  y conceptualizar un centro de datos, no sólo desde el punto de vista de quien lo usa sino de quien lo construye y de los participantes involucrados en el ecosistema que representa un CD. “Hace 20 años eran áreas muy estáticas en donde se corrían algunos de los procesos de las compañías y hoy es un ente dinámico por su uso, generando aplicaciones con diversas finalidades y objetivos, lo que ha acelerado su implementación”, dijo.

El crecimiento año contra año, en los últimos tres, según Datacenter Dynamics es de 15% en el país, lo que denota una actividad por arriba de cualquier otro segmento en el mercado. En esta dinámica se sigue buscando bajar los costos de operación y ahí está el consumo de energía para ser más eficientes.

“La rapidez con la que la tecnología se mueve nos está obligando a ser más flexibles, al llegar nuevas soluciones requieren más consumo de energía, un crecimiento más rápido, menor tiempo de implementación y por ello se buscan productos que ayuden a tales objetivos”, mencionó Enrique Chávez, director de operaciones en América Latina, Norte y Caribe en Eaton.

Madurez
Para Furukawa, aunque el mercado es dinámico y continua desarrollándose, no es del todo maduro en México, debido a factores como la resistencia a confiar la información a terceros, los altos costos de inversión de las diferentes tecnologías que involucran el diseño, construcción e implementación de las mismas. Calcula que probablemente en cuatro o cinco años se podrá decir que el mercado mexicano iniciaría su etapa de madurez.

“Hoy no se puede operar un centro de datos sin la modularidad, a la cual vemos a nivel de servidores, de redes, de equipo de comunicaciones y en otros componentes como los sistemas de enfriamiento, aires acondicionados de precisión, sistemas de distribución y respaldo de energía”, explicó López.

Ese florecimiento va rindiendo frutos y se traduce en un CD completo modular como la oferta que ya hay en los contenedores o sistemas prefabricados, en los que el cliente puede ir construyendo de manera paulatina su data center con costos menores en diseño e implementación, además del mantenimiento y bajos costos operativos.

A decir de Miguel Monterrosas, encargado de la dirección técnica de soporte en Tripp Lite, sí se está desarrollando de manera significativa, aunque los CD muy grandes son pocos en el país y esos han evolucionado en tecnología, siempre requieren de dispositivos para seguirlos equipando, pero hay que voltear a los que pertenecen a empresas medianas, en donde comienzan desde un simple rack y poco a poco van creciendo.

“Incluso el centro de datos ya se hace presente en los hogares, los cuales están conformados por un rack donde se centraliza toda la información, redes inalámbricas, el acceso al Internet, comunicaciones y bases de datos, además de contener la información del IoT de casa y sistemas de video vigilancia”, abundó el vocero.

En el mismo tenor está Eaton, al respecto Chávez observa que ya se habla mucho de estos centros modulares, donde se crece conforme a la demanda, porque cualquier proyección que se hace puede cambiar en un periodo de tiempo relativamente corto. Esto sirve cuando no se tiene claridad en el consumo que pueden tener en los próximos años en energía, por ejemplo, y así pueden ir pagando, sin arriesgar la confiabilidad del sistema y buscar siempre la eficiencia.

“También es palpable que las empresas muevan parte de la operación de CD fuera de la misma, administrado a través de un tercero. Los que ofrecen servicios de alojamiento de datos y protección de ellos están creciendo porque los clientes se dedican a otro negocio y prefieren la administración de un tercero y en la nube”, compartió el director del fabricante.

“El 2% de la energía total que se genera en el mundo va dedicada a centros de datos”: Enrique Chávez, Eaton

Metamorfosis
Por su lado, Rosalinda Pérez, gerente comercial de Rittal, observa en México un mercado muy importante en este tema, siendo a nivel Latinoamérica el segundo más grande después de Brasil. “Además, año con año se ha registrado crecimiento, y creo que esta tendencia continuará: en cuanto a gabinetes, de 2012 a 2013 creció un 16%, mientras que de 2013 a 2014 el crecimiento fue de 14%”, dijo.

En cuanto a la adopción de tecnologías, Pérez atestigua que las empresas que invierten en CD tienen estrategias que giran en torno a la virtualización. De esta manera hacen más con menos, es decir, optimizan sus recursos.

“Específicamente podemos hablar de virtualización de servidores, aplicaciones y usuarios (“thin” computing). Esto lo hemos visto sobre todo en los sectores financieros, iniciativa privada y gobierno”, abundó. Y punto medular es el que resaltó López de Schneider, quien a su parecer, actualmente está cambiando la idea que esto sólo es para grandes empresas y en  eso ha ayudado la modularidad, con proyectos completos basados en ello, pero dirigidos a la PyME donde se arranca desde un rack o gabinete que contenga aires acondicionados, sistemas de respaldo y de monitoreo contra incendios y seguridad; con dos o tres servidores y un sistema de comunicaciones, de ahí hasta los que tienen funciones de hosting.

“Está cambiando el concepto, debido a que la demanda de espacio y manejo de la información se ha incrementado, y entonces ya no es necesario que un centro de datos sea de grandes soluciones sino de alternativas más ad hoc a las demandas de cada tamaño de empresa”, señaló Monterrosas.

Ante ello, los datacenters grandes ya rentan hasta medio rack o medio gabinete, para que las empresas se animen a poner en terceros su información y no inviertan en infraestructura por poco que se requiera.
Según Chávez, los CD grandes o megas están más que posicionados, así como las reglas con las que se basaron para la construcción y puesta a punto; los clientes tienen muy claro las certificaciones que deben cumplir para ofrecer confiabilidad. Pero la oportunidad está de los medianos hacia abajo. Ahí hay una mayor labor por hacer, cada día hay más inquietud por ver cómo se puede cumplir.

Socio actual
Para Fernando Zanetti, gerente comercial Furukawa América Latina, los aspectos que el integrador y el distribuidor toman en consideración son energía, enfriamiento, virtualización, control de acceso, CCTV y soluciones de cableado estructurado (cobre y fibra óptica), porque para muchos casos, las construcciones son hechas llave en mano.

“Nuestros integradores tienen la capacidad de integrar las diversas soluciones que se requiere en los CD y para garantizar las buenas prácticas, los soportamos por medio del entrenamiento y certificación, además de tener personal especializado para apoyar al integrador en la instalación de cada proyecto”, explicó Zanetti.

En el trayecto de los centros de datos los canales han tenido un papel fundamental; hace 15 años se comenzó un desarrollo de redes, la voz, las comunicaciones y el video, hoy se está dando una nueva convergencia hacia los sistemas que integran no solamente los que diseñan un centro de datos sino del edifico, ahí ya entra el Internet de las Cosas (IoT).

“El asociado es quien hace la integración de todo este ecosistema, ya no sólo del cómputo o de los componentes de la red, sino complementar los elementos de un edificio inteligente porque finalmente están conectados a la misma red. Los que estén mejor preparados al asimilar estas tecnologías tendrán mayor éxito, pero se deben especializar en algún elemento, lo que les dará ventaja versus los que se queden comercializando soluciones de cómputo solamente”, abundó López.

Para Tripp Lite, el perfil está en los integradores de soluciones que normalmente trabajan con routers o switches y que son especialistas en comunicaciones. Aunque al tradicional de distribución de cómputo se le ha capacitado y mostrado la manera de hacer negocio con estos nuevos portafolios de soluciones, porque muchos siguen encajonados en la venta de computadoras o licencias y aquí hay la oportunidad de ofrecer otras alternativas con mayores márgenes.

Según el representante de Eaton, tienen que poner foco de manera constante en el trabajo, en desarrollar las capacidades en su personal para ofrecer la solución de manera completa porque son varias especialidades dentro del data center. “En TI las inversiones no son pequeñas, debe poner atención en cada punto porque no sirve de nada si se integra el mejor cómputo, los mejores equipos de comunicación, de almacenamiento, virtualización y procesadores, pero la energía al final es la que falla”, explicó.

Por ello, la firma lleva a cabo una estrategia llamada “El Quinto Elemento”, pues es común que en una infraestructura se piense en redes, cómputo, almacenamiento, virtualización y la energía entra como complemento para proteger toda esa estructura y darle continuidad al negocio, y el canal debe estar al tanto de ello. Pero deben estar claros en el segmento que se quieren desarrollar para entonces, saber en dónde dirigir los esfuerzos al certificarse y entrenarse.

“Dado que es un mercado que exige vanguardia tecnológica (y que es el corazón de la empresa), el negocio para el canal de integración comienza por un alto nivel de capacitación, en el que el usuario vea en él a un consultor experto y no a un más de sus proveedores”, aseguró Pérez.
Insistió en la importancia que el integrador debe contar con mano de obra calificada para asegurar la adecuada instalación de las soluciones que está ofreciendo. “Obviamente deberá demostrar la empatía necesaria con el cliente del CD, pues en sus manos estará el correcto funcionamiento del negocio de la empresa en cuestión. Es por ello que deberá demostrar su absoluta confiabilidad. Si se llevaron a cabo estas actividades correctamente, es seguro que la siguiente parte del negocio será para él: el mantenimiento y servicio de las instalaciones. Un negocio de largo plazo”, resaltó la entrevistada.

Solamente los canales que entiendan su importancia dentro del exigente mercado de los CD serán los que logren, más allá del negocio, mantenerse y crecer.