Más incertidumbre: la economía y la industria TIC ¿dónde están situadas?
Por Erick Rodríguez, consultor de negocios Select:
En los últimos días ha habido diferentes noticias económicas que han creado mayor incertidumbre en la economía global, y por consecuencia, en el país. Por un lado, la suspensión de pagos de Grecia, y por otro, la noticia de que otras economías están atravesando por situaciones complejas de deuda como el caso de China. Si la desgracia griega es preocupante, por la dimensión de la economía china, la situación para esta última puede ser aterradora. Vayamos por partes para ver qué sucede con México y en la industria TIC.
Implicaciones para México del entorno global reciente
A raíz de la suspensión de pagos de Grecia, los medios de información comenzaron a destacar diversas situaciones de variables económicas en México que ya se venían presentando desde meses previos. Básicamente, para el país, el entorno se ha vuelto más hostil por la disminución de los precios de los energéticos, en especial por la entrada de oferentes de petróleo que ha llevado a mantener en precios los más bajos de su historia a la mezcla mexicana y de ahí el boquete fiscal que solo se ha tratado de enfrentar con los aumentos de la gasolina, la reforma fiscal 2013 y los recortes recientes al gasto público. Para el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2016, se recortarán 246 programas sociales. Esto lo anunció; la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) hace dos semanas. La depreciación del peso frente al dólar es un proceso que viene presentándose desde el último trimestre de 2014, previendo que en 2015 rebasaría la barrera de los 16 pesos por dólar. Un día posterior al default griego se cumplió este presagio del tipo de cambio y en esta semana llegó a cotizarse el dólar a $16.13, mientras que el euro a $17.70.
Por lo mientras los pronósticos económicos han venido a la baja, de un 3.4-3.6% que se esperaba que creciera en 2015 la economía, la última encuesta a especialistas en economía del Banco de México señala un 2.6% de crecimiento, y para 2016, 3.2%.
¿Qué tanto ha impactado a sus precios la depreciación del peso frente al dólar?
Los mismos especialistas en economía consultados por el Banco de México, pese al panorama internacional, evidentemente, más complicado, señalan que el clima de los negocios mejorará; en los próximos seis meses en comparación con el primer semestre (65% de los encuestados).
Este aparente optimismo contrasta con las recientes cifras del Sistema de Indicadores Cíclicos del INEGI reportadas al mes de abril de 2015 y publicadas a principios de julio. De los dos indicadores: el coincidente, que nos expresa el estado general de la economía y el adelantado, que intenta anticipar la dirección del coincidente; los resultados señalan que el primero ha disminuido tres meses consecutivamente, y el segundo nueve, respectivamente. Evidente señal de persistencia del poco dinamismo de la actividad económica.
Si apreciamos esto por sectores económicos, de acuerdo al último reporte de BBVA-Research sobre México, en 2015, los sectores que más crecerán, son: Información en medios masivos (7.3%), que incluye la edición de material impreso, software; la industria fílmica, video, radio, televisión, entre otros. Le sigue el sector primario (5.8%), compuesto por agricultura, silvicultura y pesca; después manufactura (3.5%), comercio (3.4%), gobierno (3%) y finanzas y seguros (2.9%).
Es relevante mencionar que uno de los sectores que ha mantenido dinamismo es el sector exportador, sobre todo, la manufactura de exportación. Las tasas del año pasado (2014) y de este año (2015), se ubican por arriba del 7%.
¿Qué tanto ha impactado a sus ventas la depreciación del peso frente al dólar?
De las escasas medidas ante esta situación por parte del gobierno mexicano, está el anuncio afortunado de que no habrá aumento en impuestos ni creación de nuevas imposiciones fiscales hasta 2018. La inversión sigue restringida, sobre todo por el componente de inversión pública que ha estado reprimido por los recortes presupuestales. Se evidencia también la depreciación del peso rebasando ya la barrera de los 16 pesos por dólar y es posible que en el 2º semestre de 2015 llegue a 16.40.
Si bien, el entorno se ha complicado, lo que más preocupa es que a nivel del mercado interno no estamos haciendo nada para destrabar el raquítico crecimiento, y que de lo contario, hay múltiples focos rojos. Los que más afectan a la demanda agregada son la inversión pública y gasto público que están lejos de ser incentivos para incentivar el crecimiento este año y para 2016.
La precavida industria TIC
En la industria de TIC las cifras de ventas al cierre de junio reportan lo siguiente: los negocios que crecieron poco en ventas pasaron de 40.58% en mayo a 44.7% en junio. Los que mantuvieron ventas constantes bajaron ligeramente de 28.9% en mayo a 27.6% en junio; los negocios que crecieron mucho en sus ventas ascendieron de 9.4% a 11.4%; bajó el porcentaje de los que decrecieron poco en sus ventas de 15.9% a 11.4% y el poco porcentaje de los que decrecieron mucho bajo de 5% a 4.7%.
¿Exporta usted algún producto y/o servicio a otro país?
El comportamiento habitual que representa más del 70% de las respuestas, se ubica en poco crecimiento y ventas constantes en la industria, con un vaivén entre los que crecieron mucho y los que decrecen poco en ventas. Así, en el 2T-2014 la facturación creció menos que el 1T-2014, y la confianza también disminuyó. Del 2T al 3T de 2014, la facturación siguió disminuyendo su ritmo de crecimiento pero la confianza creció y persistió hasta el 4T. Para el 1T-2015 las direcciones vuelven a convergir, disminuyendo los crecimientos de ambos indicadores.
Lo alentador para la industria TIC es que pese a representar el 3.76% del PIB, y restando el sector de telecomunicaciones, es decir, TI siendo el 1.93% del PIB, es una industria que suele ser de las menormente afectadas ante una situación global adversa y de desaceleración económica. Resta atestiguar qué medidas de política económica emprende la actual administración federal ante la agudización de la incertidumbre global, pero, tal parece que no hay mucho margen de maniobra por la debilidad del estado mexicano desde el punto de vista fiscal, con ingresos reducidos y obligado a seguir con recortes presupuestales que achican en todos sentidos su posible intervención en el ciclo recesivo de la economía.
